*Las bombas aspersoras Husky valen la sexta parte que las bombas que comúnmente utilizan los productores del campo; son de fabricación china y conocidas como desechables puesto que no se consiguen refacciones en el mercado
ERNESTO ROJAS AYUZO
En la foto, un Carlos Grau López sostiene el micrófono mientras el gobernador Alejandro Murat entrega a un grupo de campesinos una bomba aspersora Husky durante la quinta audiencia pública organizada por el gobierno del estado de Oaxaca y llevada a cabo este martes en Ixtlán de Juárez.
Mientras la mujer recibe la bomba, sus acompañantes mantienen el rostro adusto; y uno de ellos, de fastidio franco mientras observa el aparato.
A buen seguro, Grau López no le corrió la cortesía a Murat de informarle que las bombas que estaba otorgando y con las que se tomó la foto del recuerdo cuestan una sexta parte de lo que valen las que usan regularmente los productores del campo.
Y además, son desechables porque no se consiguen refacciones.“Puras chingaderas regalan”, tronó otro campesino.
Chinas y desechables
Las bombas aspersoras Husky son consideradas desechables porque no cuentan con refacciones en el mercado, son de plástico de mala calidad y su costo oscila entre 250 y 375 pesos, dependiendo del proveedor. 
Las bombas de la marca Jacto, Swissmex o Lola que son las más comerciales y por ende fáciles de reparar debido a la existencia de refacciones; tienen un precio en el mercado desde mil 200 hasta mil 600 pesos.
La diferencia de precios se debe, justamente, a la calidad de los materiales.La aspersora Husky es de fabricación China y trata de imitar los colores de las aspersoras Jacto, muy conocidas en el mercado agropecuario.
El gobernador del estado, Alejandro Murat durante la quinta audiencia pública en la sierra norte publicó en su cuenta de Tuiter que, a través de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Pesca y Acuacultura (Sedapa), otorgaron aspersores, bombas de fumigación, fertilizantes e insecticidas a quienes trabajan con dedicación el campo oaxaqueño.