En los 13 días entre la desaparición de Debanhi y su hallazgo, decenas de mujeres fueron encontradas sin vida en el norte, centro y sur del territorio mexicano. Frida Alondra, Itzel, Victoria Guadalupe, María Fernanda son apenas algunas de ellas. Las protestas se encienden alrededor del país.
Durante los 13 días entre la desaparición de Debanhi Escobar hasta que las autoridades de Nuevo León notificaron el hallazgo y, posteriormente, el reconocimiento del cuerpo, decenas de mujeres fueron halladas a lo largo del país, en norte, centro y sur del territorio mexicano, de acuerdo con reportes de autoridades, que revelan signos de tortura y huellas de violencia sexual contra las víctimas.
Aunque el número exacto de carpetas de investigación abiertas por feminicidio durante este lapso se conocerá hasta la siguiente actualización del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el cual se basa en los informes enviados por fiscalías y procuradurías estatales, Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) denuncian que, con base en las cifras oficiales, 11 mujeres son asesinadas cada día en el país, con la impunidad como constante, que permite la espiral de violencia.
FRIDA ALONDRA… Y LAS DEMÁS
El día de la desaparición de Debanhi, el 9 de abril, también fue la última vez que se supo de Frida Alondra, una joven afromexicana de 13 años que fue hallada sin vida el 12 de abril en el municipio de San Juan Bautista Lo de Soto, en la costa de Oaxaca.
Originaria de Cuajinicuilapa, Guerrero, Frida fue localizada en un camino de terracería en el referido municipio, que se ubica en zona limítrofe con Guerrero. La Fiscalía General del Estado (FGE) de Oaxaca inició la carpeta de investigación por el delito de feminicidio debido a las circunstancias del hallazgo y a los signos de violencia.
Organizaciones feministas de Oaxaca denunciaron que en lo que va del sexenio del priísta Alejandro Murat han ocurrido 615 feminicidios que, en su mayoría, continúan impunes, lo cual, afirmaron, es un aliciente para la violencia.
Un día antes de la desaparición de Debanhi, en Querétaro, se localizó el cuerpo de la niña Victoria Guadalupe, que había desaparecido el 6 de abril. El caso generó una reacción masiva de la sociedad, para exigir justicia al gobernador Mauricio Kuri.
Los restos estaban en el condominio Moros en Paseos del Marqués donde vivía la menor. Con base en el testimonio de sus familiares, Victoria iría a la papelería que se encuentra a tan solo 80 metros de su casa, lo cual, según María Teresa Martínez, su madre, solía hacer de forma recurrente.
El cuerpo se encontraba envuelto en plástico. La fiscalía estatal expuso que los restos habían sido depositados en el lugar posteriormente, debido a que ahí, en los recorridos que hicieron de la trayectoria que debió seguir la niña desde su domicilio hasta la papelería, habían revisado alcantarillas, coladeras y espacios de riesgo, en todos los condominios, sin que antes estuviera.
El 20 de abril, cuando se cumplían 11 días de la búsqueda de Debanhi, Itzel Orduño, una joven de 20 años, fue asesinada al interior de un domicilio en El Fuerte, Sinaloa.
Itzel había salido de su casa para acudir a su trabajo en una estética ubicada en la colonia Centro, pero al llegar al local un hombre que vivía a lado del negocio la interceptó y, con engaños, la metió al domicilio. Medios locales refieren que este sujeto la atacó y, después, semienterró el cuerpo en el patio.
La madrugada del 20 de abril también se encontró el cuerpo de una mujer a la orilla de la carretera federal México-Cuautla, en la región de Los Volcanes. La víctima tenía un disparo en la cabeza y no tenía ropa. Y los casos continúan por el grueso de la geografía nacional…
El día 21, cuando la fiscalía de Nuevo León encontró un cuerpo, entonces sin afirmar que se trataba de Debanhi –en una alcantarilla del motel Nueva Castilla que se utilizaba para una antigua alberca y ya no estaba en uso–, en Tapachula, Chiapas, una mujer sin identificar fue encontrada muerta en el bordo del río Coatán, a la altura de la colonia Jerusalén; el cuerpo estaba atado de pies y manos con agujetas.
LAS SOSPECHAS DE UN CASO SIN RESOLVER
Ese día también vecinos del fraccionamiento Colinas del Roble de Tlajomulco, Jalisco, reportaron que habían escuchado disparos en las inmediaciones del cruce de las calles Volcán Jamay y Cerro de la Silla. Al llegar al lugar, elementos de seguridad corroboraron que yacía una mujer, de alrededor de 35 años, con un impacto de bala en la cabeza.
Las primeras horas del viernes 22 de abril el padre de Debanhi, Mario Escobar, confirmó que el cuerpo hallado en el motel era el de su hija. Recriminó las veces que se hicieron peritajes en el lugar, sin resultados. Pidió perdón a su familia y a las personas que los apoyaron en la búsqueda, al afirmar que se equivocó al creer en la fiscalía estatal; además, acusó directamente a Juan David Cuellar, el conductor del auto del que se bajó Debanhi, de acosarla.
Ese mismo día, una mujer de 34 años fue asesinada en Yautepec, . Con base en los informes de seguridad recabados por medios, sujetos que se trasladaban en motocicleta dispararon contra la víctima, que falleció posteriormente en un hospital. Activistas estatales denunciaron que, en lo que va del año, suman 34 feminicidios en este estado.
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Entre éstos, la de la estudiante Evelin Afiune Ramírez, reportada como desaparecida el 24 de marzo y localizada sin vida dos días después en Cuautla, cuyo caso, con base en informes recabados por la fiscalía de esta entidad, está posiblemente ligado a una red de trata de personas que engancha jovencitas a través de ofertas de empleo en Facebook.
Después de que se confirmara el feminicidio de Debanhi, los casos han seguido: el sábado 23, el cuerpo de una mujer que fue asesinada a golpes fue localizado en el interior de su domicilio ubicado en la comunidad de Valle Verde en Zitácuaro, Michoacán.

Gritos y exigencias de seguridad en la Ciudad de México. Foto: Graciela López / Cuartoscuro.com.
SÓLO EN NUEVO LEÓN
En el estado gobernado por Samuel García, durante la búsqueda de Debanhi se encontraron con vida cinco mujeres más que estaban desaparecidas, cuatro de ellas menores de edad.
De acuerdo con la Comisión Estatal de Búsqueda se trata de Irma Hernández, de 19 años, y las menores Irlanda Ramírez, de 14; Ingrid Castillo, de 15; Brisa Porras, de 16, y Jenifer Almaguer, de 15 años. Asimismo, alertó que de 327 reportes por desapariciones de mujeres en lo que va del año, 26 siguen sin ser localizadas.
Antes de que se conociera el caso de Debanhi, en Nuevo León desapareció el domingo 3 de abril María Fernanda Contreras, de 27 años, cuyo cuerpo fue hallado cuatro días después en un domicilio ubicado en calle Circuito de las Fincas, colonia Ex Hacienda Santa Rosa, en Apodaca. No obstante, hasta el 10 de abril, tras realizar las pruebas genéticas, se confirmó la identidad.
La causa de muerte de María Fernanda fue contusión profunda de cráneo.
El 20 de abril, un día antes de que la fiscalía de Nuevo León informara que había encontrado el cuerpo que, horas después, confirmaría que era el de Debanhi, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública dio a conocer los datos sobre incidencia delictiva en el primer trimestre del año, los cuales refieren que del 1 de enero al 31 de marzo se iniciaron 215 investigaciones por feminicidio en el país, más otras 426 por muertes violentas de mujeres que fueron categorizadas como homicidios dolosos.