El drama en torno al submarino perdido Titan ha llegado a su trágico final. Después de descubrir “restos de la cubierta trasera” cerca de la zona del Titanic, la compañía OceanGate confirmó la muerte de los cinco tripulantes del Titan, lo que ha llevado a una teoría inquietante: el submarino pudo haber implosionado debido a la intensa presión del agua en las profundidades. Las autoridades continúan la búsqueda del submarino desaparecido en vivo.
Según la teoría planteada por el buzo experto Michael Harris, el submarino pudo haber sufrido una implosión debido a la enorme presión de las aguas oceánicas. Esta teoría se basa en el hecho de que los restos encontrados pertenecen al Titan y fueron hallados a 500 metros de la proa del Titanic, en una zona suave del lecho marino. La presión extrema a la que se sometió el submarino podría haber superado la resistencia de su casco, provocando su colapso y la tragedia que se cobró las vidas de la tripulación.
La falta de supervisión y los posibles fallos estructurales del submarino también se han señalado como factores que respaldan la teoría de la implosión. Además, se detectaron sonidos de “golpes” en la zona donde desapareció el Titan, lo que podría indicar la deformación abrupta de la estructura debido a la implosión.
El submarino Titan, operado por OceanGate, se encontraba sumergido en el fondo del océano después de su visita a los restos del Titanic. Aunque los servicios de rescate mantuvieron la esperanza de encontrar al submarino y rescatar a la tripulación, lamentablemente, se confirmó la muerte de los cinco pasajeros debido a una implosión catastrófica. La Guardia Costera de Estados Unidos y OceanGate expresaron sus condolencias a las familias afectadas por esta tragedia.
El Titán quedó atrapado en el fondo del océano después de que perdiera contacto con la nave nodriza durante su inmersión para explorar los restos del Titanic. A pesar de contar con oxígeno y soporte vital para 96 horas, el submarino fue incapaz de salir a la superficie y sus tripulantes se vieron condenados a una muerte trágica. Se han planteado preocupaciones sobre la capacidad del Titán para soportar grandes presiones debido a su diseño, y la empresa OceanGate confirmó que la nave estaba construida con fibra de carbono y titanio, supuestamente capaz de resistir profundidades de hasta 13 mil pies.
Es una lamentable historia que nos recuerda los peligros y desafíos de la exploración submarina en las profundidades del océano.