El Comité de Investigación de Rusia ha informado que el número de muertos en el ataque a la sala de conciertos Crocus City Hall en Moscú ha aumentado a 137, según su último informe publicado este domingo.
Los servicios de emergencia continúan recuperando cuerpos sin vida de entre los escombros del recinto, incendiado por los atacantes.
Durante la inspección de la escena del ataque, no se encontraron cadáveres con trampas explosivas ni otros rastros de minería. Los investigadores han descubierto dos carabinas Saiga, más de 500 cartuchos y 28 cargadores abandonados por los atacantes antes de darse a la fuga.
Este atentado se convierte en el peor en la historia contemporánea de la capital rusa, superando la crisis del secuestro del teatro Dubrovka en 2002.
Según el Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia, el número de heridos asciende a 152, con 105 personas aún hospitalizadas y 32 recibiendo atención ambulatoria. Al menos 40 personas han sido sometidas a cirugía de urgencia desde la noche del viernes hasta el sábado.
Fuente: Media Editor